martes, 7 de diciembre de 2010

historias para lelas

Cucuruchito
redobla tres
veces al día,
canta, silba
y se rasca.
Chupa verga,
no te desidrates
ni te olvides
de chupar también
los huevos,
están afeitados
(esta noche, jamaica no problem).
Gócara en el patio
tiene una guerra
con los pitufos
del jardín,
pobresito vive alucinado,
dicen que seguía
un espiral de colores
cuando se rompió
la nariz contra la pared.
¿Cuando fue divina
que tu culo, dejo de
ser esa manzana prohibida
y se convirtió en la
máquina de recibir
pijazos del barrio?,
¿Donde perdiste tu
virginidad transparente?,
Se comenta que después
de la noche de tu boda
con tu ex-marido
se despertó y miró las
sábanas y lo único
rojo que vio era
tu corpiño.
Saragusta no entiende
lo que le gusta,
y se pierde en si
mismo cuando intenta
perderse en el exterior,
da vueltas y vueltas
tratando de no salir
de la primer baldosa
que pisó cuando salió
del edificio.
Cucuruchito ni tiene
ni tatá, ni mamá,
pero vive conformándose
con un esquema de
lo que sería
su tata-mama. A veces
hace rituales con
Góngora y alucinan,
se equivocan, piensan
que están agradeciendo
a la Pacha Mama.
¿Qué carajo le agradecen,
si están encerrados
en un laberinto de cemento?.
Saragusta hoy tiene suerte
y hoy debuta, se cruzó
con "la domadora de porongas"
la amiga del barrio,
la amiga de los "machos",
Saragusta igual tiene miedo
es demasiado prevenido
no se compró una cajita, sino
un pack de preservativos.
Pobres, pobres, pobres.

1 comentario:

  1. ahahaha, oye, me gusto mucho esto.
    parece una canción, o por lo menos puede leerse con ritmo.
    me gusto me gusto me gusto.

    y no poh, no he encontrado el amorsh, "afin"
    josé es un amigo.
    lo quiero, pero además le dije eso porque es de pocas (o muchas), personas a las que se le puede decir eso y no esquematiza nada.


    oye, y bonita foto de fondo, me encanto.

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