lunes, 1 de agosto de 2011

cerraba los ojos y veía la caída

Eran como diez,
que al nuestro
provocaban.
Alrededor nuestro
caminaban
entre gruñidos
de amenaza
cortando la poca
luz del camino
a su paso.
Un auto
gris Peugeot,
rescato
dos cuerpos
pasados de montaña
futuros cadáveres
de no haber
aparecido.
Sin luz para colmo
el pueblo estaba.
En Buenos Aires
o
en Capilla del Monte,
un auto
gris
Peugeot,
me deja sin palabras.

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